Amor, gracias por estar a mi lado
Gracias por estar a mi lado viendo lo que he logrado hacer.
A veces me olvido, con los ojos llorosos que tú también has tenido que crecer.
El parto y el nacimiento mientras ese dolor era mío.
Tu mano nunca estuvo lejos.
Tus ojos nunca tan atentos.
Mi miedo a ser madre primeriza.
El inicio de la depresión postparto.
Todo el tiempo te mantuviste fuerte por mí, mientras tú también tenías miedo.
Los primeros días de la lactancia materna.
Las pruebas y las lágrimas.
Siempre estabas ayudando, mientras yo gritaba en tu oído.
A veces me olvido, tan duro como fue para mí.
Tuviste que verme en ese dolor, mientras te sentías impotente.
Turnarse para levantarse en la noche.
Las batallas diarias que tengo en casa.
Lo que sientes al entrar por la puerta.
Pero siempre con una sonrisa y los brazos abiertos.
Quitándome el peso de encima una vez más.
Me has visto desolada y al límite.
Me has visto vulnerable y pequeña.
Todo el tiempo que has sido mi roca.
No te sientas al margen.
En cambio, te sientas a mi lado, mientras navegamos esto juntos.
Etiqueta a esos PAPÁS que merecen estar etiquetados en esta publicación.
Por @jessurlichs_writer
