Por favor, no le des nalgadas a tu hijo para disciplinarlo
Las nalgadas dañan el cerebro de tu hijo, pero ¿por qué tantos papás lo siguen haciendo?
Dar nalgadas a tu hijo como método disciplinario no solo NO es efectivo (los vuelve aún más agresivos y violentos) además le hace tener tendencias antisociales y delictivas. Esto se demostró con un estudio que duró 50 años en el que se analizó a 160,000 niños.
No sólo eso. Los investigadores encontraron que los niños a los que regularmente se les daba nalgadas (una o más veces al mes) tenían menos materia gris en cierta áreas del cerebro asociadas con la depresión, adicciones y otros trastornos mentales de salud.
Elizabeth Gershoff, investigadora de la Universidad de Texas, estudió el castigo corporal durante 15 años y se dedicó a revisar todos los estudios que se han hecho sobre los efectos de las nalgadas y encontró que no hay estudio que en el que se encuentre una consecuencia positiva a las nalgadas.
Pero si por todos lados escuchamos que dar nalgadas a tu hijo es tan malo,
¿Por qué tantos papás lo siguen haciendo?
Muchos papás y mamás creen que una buena nalgada a tiempo hará que su hijo aprenda las lecciones, pero no hay nada más erróneo que esto. Mientras más castigas físicamente a tus hijos por su falta de autocontrol, menos autocontrol ellos desarrollarán.
Cuando tu hijo de repente empieza a hacer un berrinche en el supermercado para que le compres lo que quiere y al decirle que no, llora más, entonces tú decides darle una nalgada para que entienda que No es No, tu hijo no aprenderá a autocontrolarse. Tan sólo aprenderá a tener miedo y a que la agresión física es la única forma de solucionar los problemas.
“Todos dejaríamos de hacer lo que estamos haciendo si alguien nos golpea, pero eso no significa que hayamos aprendido por qué es que alguien nos golpea, o qué debemos hacer en su lugar, y este es el motivo real detrás de la disciplina”.
Muchos papás dicen “a mi me pegaban y salí bien”
Pero no por eso debemos repetir los errores de nuestros padres, queremos hacer mejor las cosas para nuestro hijos. Muchos de esos niños a los que se les pegaba ahora son adultos que están acostumbrados a obedecer sin cuestionar, a aguantar humillaciones de sus superiores para luego desquitarse con los que están debajo de ellos. Y así vivimos en una sociedad en "la que sí me friegan, yo friego al más débil". ¿Queremos esa sociedad para nuestros hijos?
No hay un aprendizaje cuando se dan nalgadas. Tan sólo estás creando efectos devastadores e irremediables en el cerebro de tu hijo.
No quiere decir que no haya disciplina en tu casa, existen otros métodos más respetuosos y efectivos para criar a nuestros hijos.
Por favor, no le des nalgadas a tu hijo para disciplinarlo...
Sandy Bleiberg para Naran Xadul Sandy es escritora y editora, mamá de dos chamacos hermosísimos y amante de reír hasta que duele la panza. sandybley@yahoo.com