Mamás trabajadoras aportan más cosas a sus hijos de lo que imaginas (y no es nada económico)

Ser mamá trabajadora no es nada fácil… casi el 100% de tus pensamientos son sobre si estás dedicando suficiente tiempo a tu hijo o si perderte esos momentos claves como su primer palabra o sus primeros pasos, realmente vale la pena.

Sin embargo, este esfuerzo que haces tiene su recompensa: tus hijos tendrán un trabajo exitoso y serán más acomedidos, de acuerdo con un estudio de la Harvard Business School.

La investigación revela que las niñas criadas por madres que trabajan fuera de casa ocupan puestos de alto rango en la edad adulta, y ganan 23% más que aquellas que tenían a su mamá junto a ellas durante la infancia.

Además, tienen un 4.5% más de probabilidades de ser trabajadoras independientes o fundar su propia empresa; tienen mejores calificaciones; demuestran mayor liderazgo  e iniciativa en las actividades que realizan.

En tanto, los niños son más propensos a ser más responsables, a ayudar a las labores del hogar y a disfrutar más tiempo con sus seres queridos.

Otro punto a favor es que las mamás que trabajan y que encuentran el equilibrio al combinar la maternidad con su lado profesional, es que son más saludables física, mental y emocionalmente.

Esto se debe a que el trabajo le brinda a las mujeres una autonomía, control y les permite sentirse expertas en algo de lo que hacen, es decir, equilibran las emociones y sentimientos que vive una mamá primeriza (que debe aprender a ser mamá).