Cómo tener niños más felices y tranquilos
La respuesta es muy sencilla: simplifica su mundo. Tiene muchos beneficios, para ti y para ellos, pues estar lejos de horarios rígidos y actividades que no les gustan del todo, los hará estar más conectados con su entorno y por supuesto, contigo.
Simplificar no significa que se vayan a sentir sin nada que hacer, al contrario, les das la oportunidad, el tiempo y el espacio de explorar el mundo sin este constante sentir de que es demasiado.
Esto los estresa y esto se refleja hasta en casa: muchos juguetes, muchas actividades, mucha información, muchas tareas, muchas elecciones, corriendo siempre a terminar algo porque lo siguiente ya va a empezar. Esto solo los sobreestimula.
"Muchos de los problemas de comportamiento actuales provienen de niños que tienen demasiadas cosas y viven una vida que es demasiado rápida", dice Kim John Payne, autor del libro Crianza simple: Usar el extraordinario poder de menos es más para criar niños más tranquilos, felices y seguros.
Para simplificar su rutina es necesario empezar en casa, bajando la cantidad de juguetes y ordenando su área de juegos, de esta manera jugará más concentrado y enfocado en una sola cosa y no en querer hacer todo al mismo tiempo.
En su área de juegos, ordena sus juguetes favoritos, añade también sus libros y pon cojines y almohadas para hacer una esquina acogedora, tu hijo poco a poco adaptará este espacio para su entretenimiento con lo que tiene.
Con sus actividades fuera de la escuela, redúcelas por prioridad y deja algunos días libres para que puedan jugar como quieran, ya sea en casa o al aire libre. De esta manera cuando quieras introducir alguna otra actividad importante, podrás tener toda su atención en eso, sin volver de nuevo al círculo vicioso de miles de actividades.
Y por último, déjalos descansar, si quieren estar todo el día acurrucados y relajados, Payne dice que esto es muy bueno, pues el descanso nutre la creatividad, la creatividad a la actividad, la actividad al descanso y así sucesivamente.