No, no estoy intentado ir por la niña. Soy una feliz mamá de varones
Cuando me embaracé no podía con la emoción por saber el sexo de mi bebé. Fue al cuarto mes cuando en un ultrasonido vimos claramente que sería niño, lloré de felicidad. Dos años después otro niño venía al mundo, mis sueños se estaban haciendo realidad.
Muchas personas desde el primer embarazo me hacían comentarios como: "Qué bueno, le estás dando un niño a tu marido", o "Siempre puedes buscar después tener una niña". En el segundo embarazo me preguntaban si buscaría tener una niña, como si se pudiera elegir el sexo o uno pudiera decidir que seguirá en el siguiente embarazo.
La verdad nunca le di mucha importancia por el simple hecho de que soy la más feliz con mis hijos, sé que para muchas mamás tener una niña es totalmente una ilusión y representa muchas cosas, como vestirlas y peinarlas, enseñarles cosas que te gustan a ti y de alguna forma la ilusión de verte reflejada en tus hijas.
Pero para mí es más que suficiente, amo a mis hijos y siento que mi familia está completa con ellos, así que no, no estoy buscando una niña, ni tener clases de ballet con tutús rosas, y cabecitas llenas de moños y accesorios con brillos.
Soy feliz con dos niños porque:
- Porque ellos me aman más que a nadie.
- Sacan mi niña interna cuando juego con ellos y me muestran distintos matices.
- Siempre me retan a contarles las mejores historias o a inventar juegos divertidos.
- Me hacen amar cosas que nunca hice de niña, como jugar con dinosaurios, armar pistas de carreras o jugar a los zombies.
- Se ven guapísimos en su ropita de niños y si les llegas a poner una camisa o un traje, bueno, me derriten.
- Amo que sean tan apegados a mí, que me llenen de cariñitos y quieran estar todo el tiempo en mis brazos.
- Fue más sencillo enseñarles a ir al baño y puedo llevarlos a casi cualquier lugar si tienen que hacer pipí.
- Mis niños me dicen que soy la mujer más guapa del universo y me piden que me case con ellos.
Pero lo más importante es que mis hijos algún día se convertirán en hombres, así que es mi responsabilidad criarlos para que sea buenos, respetuosos, amables, inteligentes porque algún día serán esposos, papás, jefes, maestros y amigos.
Así que no, no estoy buscando una niña porque estoy completa criando a los hombres de mañana.
Inspirado en un texto de Ashley Wasilenko para Motherly.
