Siempre podré regresar a trabajar, pero mis hijos no serán bebés por siempre
A todas las mamás nos llega el momento de preguntarnos si trabajar es lo mejor que podemos hacer por nuestros hijos, porque siempre tendremos una carrera, pero no serán bebés por siempre.
Algunas pueden tomar la decisión de pausar su carrera un par de años, otras no tienen elección y siguen trabajando sin parar porque de no hacerlo no tendrían cómo sostener a su familia.
Pero todas compartimos el sentir de que tenemos que estar más tiempo con ellos y vamos ajustando horarios, negociamos quedarnos sin hora de comer para salir más temprano, nos llevamos trabajo a casa sólo para estar un ratito más con ellos, para no llegar a la casa con el hijo dormido y el sentimiento apachurrador de que no lo vimos en todo el día.
Cuando podemos negociar y bajar el ritmo de trabajo a medio día, también estamos sacrificando proyectos importantes, tal vez algún aumento o un mejor puesto, pero esa satisfacción se gana con tiempo extra para ver a nuestros hijos crecer.
Nunca es una decisión fácil, pues a menos que tengas una situación económica muy estable, dejar de trabajar no significaría tanto sacrificio más que el de tu tiempo libre.
Pero para la mayoría de las mamás, dejar de trabajar medio día significa ganar la mitad del dinero que ganaban, en el mejor de los casos. Significa buscar trabajos por fuera para poder completar los gastos y eso a veces suele ser muy desgastante mentalmente.
Regalarle ese tiempo a tus bebés, es preciado. No sólo ellos lo notan y disfrutan más, tú como mamá lo vives de una forma diferente, valoras el tiempo y la posibilidad de hacerlo.
Disfrutar las tardes en el parque, verlo caminar por primera vez, escuchar sus primeras palabras, poder marcar tus propias rutinas y no seguir lo que hacen en la guardería, con tu suegra o tu mamá, son cosas que no tienen precio cuando las vives.
