Habilidades que desarrollan los niños cuando juegan al aire libre
Además de ser muy divertido, jugar con tus pequeños al aire libre tiene enormes beneficios para su desarrollo tanto físico como social.
Es una gran forma de ayudarlos a practicar su motricidad gruesa y desarrollar habilidades como el balance, el control del cuerpo, la coordinación y la fuerza.
Estas son 5 formas de estimular la motricidad gruesa de tus hijos al aire libre:
1. Jugar en los columpios o resbaladillas:
Estos juegos le ayudará a fortalecer sus antebrazos, manos, piernas y bíceps. Mientras sube las escaleras de la resbaladilla, enséñale a subir la pierna de un lado y después la mano del otro, a esto se le llama movimiento cruzado y les ayuda con la lecto-escritura.
2. Construir una casita:
Además de pasar un rato súper divertido, practicando el juego de roles, tan importante para su desarrollo cognitivo y social, fomentará su concentración, esta actividad ayudará a tus hijos con sus habilidades motrices al mismo tiempo que ejercitan su cuerpo.
3. Andar en carrito o bicicleta:
Cuando los niños andan en carritos o bicicletas ganan fuerza y estabilidad. Además de tener mayor seguridad en sí mismos y recorrer algunos metros de manera independiente les regala una nueva percepción del espacio y del tiempo.
4. Juegos en grupo.
Cuando los niños se organizan para jugar en grupo con sus amigos, aprenden habilidades sociales como tomar turnos y respetar el trabajo de los demás. Los juegos al aire libre son una excelente opción para desarrollar su planificación motora.
5. Juegos con pelotas:
Cualquier actividad que involucre una pelota, potencia las habilidades motoras de tus hijos. Por ejemplo, si batea una pelota, estará mejorando su coordinación mano-ojo y también estará fortaleciendo sus brazos. Si juega a patear una pelota, estará mejorando su fuerza en las piernas, equilibrio y coordinación.