¿Por qué NO debes dar todo lo que puedas a tus hijos?
Cuando nuestros abuelos eran niños, solo tenían un abrigo para el invierno. En aquella época, tener un abrigo era un lujo, así que los niños lo cuidaban como si fuera un trofeo.
Era una época en la que la gente solía tener lo indispensable y los niños eran muy conscientes del valor de sus cosas.
Conforme ha transcurrido el tiempo, nos gusta tener muchas opciones e intentamos que nuestros hijos tengan todo lo que desean y, si es posible, mucho más. Pero no nos damos cuenta de que al consentirlos tanto, podríamos perjudicarlos.
Al querer dar lo mejor a sus hijos, los papás piensan que más será mejor. Por eso ponen en práctica un modelo de hiperpaternidad. Se han convertido en padres que obligan a sus hijos a participar en una infinidad de actividades para, supuestamente, estar mejor preparados para la vida.
Como si esto no fuera suficiente, llenan sus habitaciones de dispositivos y juguetes. Los niños occidentales tienen en promedio de 150 juguetes, lo cual es demasiado, y termina por abrumarlos.
Como consecuencia, pierden el interés fácilmente por tales juguetes y por su entorno, y no desarrollan su imaginación.
Según los especialistas, cuando los niños son abrumados de tal forma, no tienen tiempo para explorar, reflexionar y liberar las tensiones cotidianas. Demasiadas opciones terminan erosionando su libertad y les roba la oportunidad de aburrirse, que es fundamental para estimular la creatividad y el aprendizaje por descubrimiento.
La mejor manera de proteger la infancia de los niños es decir “no” a las pautas que la sociedad pretende imponer.
Aquí te damos 7 formas de proteger el equilibrio emocional de tu hijo para que pueda crecer como un adulto sano y feliz:
1. No atiborrarles de actividades extraescolares que, a la larga, probablemente no le servirán de mucho.
2. Dejarles tiempo libre para que jueguen, preferentemente con otros pequeños o con juguetes que puedan estimular su creatividad, no con juegos estructurados.
3. Pasar tiempo de calidad con ellos, es el mejor regalo que pueden hacerles los padres.
4. Crear un espacio de tranquilidad en sus vidas donde puedan refugiarse del caos cotidiano y aliviar el estrés.
5. Asegurarse de que duermen lo suficiente y descansan.
Reducir la cantidad de información, asegurándose de que esta sea comprensible y adecuada a su edad, lo cual implica hacer un uso más racional de la tecnología.
6. Simplificar su entorno, apostando por menos juguetes y cerciorándose de que estos estimulan realmente su fantasía.
7. Disminuir las expectativas sobre su desempeño, dejándoles que sean simplemente niños.
Los niños tienen toda la vida por delante para ser adultos, mientras tanto, deja que sean niños y disfruten de su infancia.
Fuente: www.rinconpsicologia.com
Por Psicología para Niños para Naran Xadul
Otros artículos que te pueden interesar: