Cómo convertir la recámara de tu bebé en un espacio Montessori
La mente de las y los niños posee una capacidad maravillosa y única.
Primero aprenden todo de forma inconsciente, y después dejan poco a poco a la conciencia, avanzando por un camino en el que todo es alegría.
El saber o el conocimiento "entra" en su cabeza por el simple hecho de vivir. Es por esto que la primera etapa del desarrollo de las y los niños es la más importante y es en la que más ayuda necesitan, deben ser acompañados y guiados en un ambiente amoroso e inteligente.
María Montessori habla de un “ambiente preparado” que les permita a niños y niñas desarrollar y fomentar su auto-aprendizaje y crecimiento.
Un ambiente preparado puede existir tanto en la escuela como en la casa, y debe ser un espacio cuidadosamente organizado para las y los niños. En este espacio, se desarrollan los aspectos sociales, emocionales e intelectuales y debe responder a las necesidades de orden y seguridad.
Estas características le permiten a los infantes desarrollarse sin la asistencia o supervisión constante de un adulto.
El diseño de este tipo de ambientes se basa en los siguientes principios:
- Simplicidad
- Belleza
Deben ser espacios luminosos y cálidos que incluyan el lenguaje, plantas, arte, música y libros. Con mobiliario diseñado y adaptado a su tamaño.
Un niño que crece en un ambiente pensado y diseñado para él, desarrolla de manera más fácil y autentica todo sus gustos, habilidades y conocimientos.
CARAMBOLA
Diseño inspirado en la infancia
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