¿Por qué acostarse de lado izquierdo cuando estás embarazada?
Siempre en el embarazo llega un momento en el que ya no te puedes acomodar para dormir.
Que si se encaja la piernita, que si se mueve mucho el bebé o porque no puedes respirar bien o tienes miedo de aplastar tu panza. Pero, calma, si duermes del lado izquierdo cuando estás embarazada, todo puede mejorar.
Un simple movimiento como acostarte del lado izquierdo con soporte en tu cadera y entre tus piernas, durante el embarazo te ayuda no sólo a ti, sino también al desarrollo de tu bebé, porque:
Lograrás un sueño más profundo
Esta posición hace que tu espalda se relaje y descanse, y es aún mejor cuando pones una almohada o cojín entre las piernas, a la altura de los muslos, para alinear las caderas. Incluso, puede aliviar el dolor de columna.
La sangre fluye mejor
Dormir de lado ayuda a incrementar el flujo de sangre hacia la placenta, lo cual llena de oxígeno y nutrientes a tu bebé y al útero. Además, estimula a que tus riñones eliminen desechos y fluidos de forma más eficaz.
Además, esta posición evita que el peso del bebé recaiga sobre la vena cava inferior, la encargada de transportar sangre desde las piernas y los pies hasta el corazón.
Beneficia la digestión
Al acostarte de lado se reduce la acidez y el malestar estomacal, lo cual es muy común durante los primeros meses de embarazo.
¿Cómo dormir mejor durante el embarazo?
La National Sleep Foundation destaca que 73% de las mujeres tienen problemas para dormir durante el embarazo, debido a los niveles de hormonas y a los cambios que experimentan en el cuerpo, así como a los miedos y ansiedad por el parto.
Todo esto hace que tu sueño no sea para nada reparador y te sientas cansada. Pero, no todo está perdido si pones en práctica la posición de acostarte de lado izquierdo cuando estás embarazada, y sigues algunas recomendaciones como:
Colocar una almohada entre tus piernas, así reduces la presión en la zona lumbar, y si la acompañas con una manta doblada debajo de tus costillas o vientre, notarás una mejoría en tu respiración.
También puedes tomar agua durante el día, y disminuir la ingesta de líquidos dos horas antes de dormir, para que tus periodos de sueño sean más largos y no se vean interrumpidos por tener que ir al baño.
No olvides evitar las comidas muy condimentadas y grasosas por la noche, de esta forma evitas el reflujo y la acidez.
Con estos consejos notarás que tu sueño puede mejorar, conforme avance tu embarazo encontrarás tus posiciones y tus hábitos, no te estreses.