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Vete, solo quiero a papá

Publicado: 19 de Enero 2023
Criando con consciencia
Foto: IG @newdarlings
Foto: IG @newdarlings

Las preferencias hacia uno de los padres son normales ya que como niños pequeños necesitan sentir que tienen control sobre algo y no hay muchas opciones para que un niño se sienta en control. 

 

Cuando un niño está cómodo rechazándote, significa que se siente muy seguro en la relación que tiene contigo. Pero ¿qué hacer? 

 

Empecemos con las frases que puedes decirle, ya que, aunque no vas a hacer lo que tu peque está demandando, puedes mostrar que entiendes cómo se está sintiendo: “Estás triste porque papá no te va a leer un cuento en la noche, lo entiendo. Mami es muy buena contando cuentos”.

 

Recuerda que una preferencia es un deseo, no una necesidad, puedes decirle: “Wow, eres muy bueno tomando decisiones, pero hoy mami va a acompañarte a dormir”.

 

Cuando llegue el berrinche (porque los habrá), apóyalo pero mantén tu decisión firme, por ejemplo: “Estás triste que papi no te puede acostar. Lo entiendo. Es duro cuando no tenemos algo que REALMENTE queremos”.

 

Ahora, ¿cómo debemos tomar esta actitud si somos la mamá o el papá que no es el “preferido”?

 

1. Reconocer por qué queremos ser el favorito y entender que no es algo personal, no es algo que los niños hagan para molestarnos o lastimarnos.

 

2. Entender que los niños pequeños viven en el momento y dicen las cosas como ellos lo sienten en ese minuto. Por eso, los rechazos son temporales y superficiales, según Janet Lansbury, especialista en crianza.

 

3. Pensemos que nuestros hijos se sienten seguros al rechazarnos porque no dudan de nuestro amor hacia ellos, por lo que hay que respetar su preferencia.

 

4. Comprendamos que la elección es algo bueno, porque significa que se ha formado un apego seguro con la mamá o papá que no es “el favorito”.

 

5. En caso de que el favoritismo sea muy fuerte y dure mucho tiempo, vale la pena revisar la relación con nuestros hijos. ¿Estamos controlando constantemente?, ¿le damos prioridad a “operar” y acabamos sin conectar?

 

6. Recuerda que la relación se construye con conexión. No podemos obligar a alguien a querer a otra persona, así que espera a que no esté tu pareja o que tu hijo esté tranquilo para jugar y reír con él.

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