Esta mamá migrante salvando a sus hijas del gas lacrimógeno en la frontera, SOMOS TODAS LAS MAMÁS DEL MUNDO
Esta es una realidad, en la caravana de migrantes que está tratando de llegar a Estados Unidos, hay familias enteras, hay mamás solteras, pero sobre todo hay niños, y la foto de una mujer corriendo con sus hijas del gas lacrimógeno en la frontera de Tijuana es algo que nos pone a reflexionar.
María Meza, una mujer de 39 años, viene en la caravana de Honduras con sus 5 hijos buscando una mejor vida en Estados Unidos. Pero no sabe si lo va a lograr, porque en cada enfrentamiento con las autoridades del país vecino, siente que puede morir, ella o sus hijos.
“Me sentí muy triste y muy asustada. Quería llorar. Fue ahí cuando agarré a mis hijas y corrimos. Sentí que mis hijas iban a morir conmigo por el gas que inhalamos”. Comentó María en una entrevista realizada por Buzzfeed News.
Todas las mamás podemos conectar con esa imagen.
Porque a todos nos conectar ese amor por nuestros hijos que es más fuerte que cualquier cosa. Toda mamá, de cualquier lugar y realidad del mundo puede conectar con la foto de María Meza, porque todas sabemos que no hay nada que cale más profundo en nuestra alma como el sufrimiento de nuestros hijos. Por eso mismo, ninguna mamá podría quedar indiferente ante esta imagen.
Todas somos María Meza porque en cierta forma haríamos todos lo que está en nuestras manos para regalarles un mejor futuro a nuestros hijos.
Un grupo de 500 miembros de la caravana intentaba cruzar el borde de la frontera, cuando los policías fronterizos amenazaron con tirar gas lacrimógeno y balas de pimienta a las personas que estaban intentando entrar a la fuerza a Estados Unidos.
María y 2 de sus hijas estaban del otro lado viendo lo que sucedía junto con otras personas de la caravana cuando comenzaron a aventar el gas. Una de sus hijas perdió sus sandalias en el ajetreo y otro casi se desmaya, a quien tuvo que echarle agua en el rostro para que volviera en sí.
Esto se puede ver en la foto que tomó Kim Kyung-Hoon para Reuters.
“Los niños tienen miedo de acercarse al bordo donde sucedió todo. Espero que Dios me permita entrar con mis niños porque en verdad estamos sufriendo. Yo sólo soy una mamá soltera que quiere darle una mejor vida a sus hijos”, comentó.
Por ahora la mamá soltera se encuentra en el estadio Benito Juárez en Tijuana, lugar que es utilizado como refugio para los hondureños.
Fuente: BuzzFeed News