Así las cosas de ser mamá durante el COVID
No sé cuánto tiempo dure ni cómo vivamos este momento, lo que sí tengo claro es el cambio que esto va a generar en nuestra generación acostumbrada a correr, a no frenar y a vivir en excesos.
Si soy una millennial, amante de las redes, de la fiesta, de las doscientas actividades que mi agenda apretada marca, y sumándole las múltiples actividades y compromisos de mis 3 lindos hijos.
Con el tiempo aprendes que eres como el buen vino, entre mas viejo mejor, quizás son las canas, las arrugas, y la madurez lo que te hace formarte y replantearte cuál es el verdadero objetivo en la vida. Yo como bien aventurada abro mi corazón, disfruto la oleada y me dejo sorprender por la resaca del mar.
La vida hoy incluye un desayuno rápido para conectar a mis pequeños a sus sesiones vía Zoom, un par de peleas de hermanos por el control de la televisión, un menú infinito de alimentos ya que en mi casa ya se perdió la noción de que son tres alimentos y se volvieron 20. Eso por no mencionar que si yo tenía una vida previa a esta, Sí queridos YO tenía una vida libre e independiente.
Eso sin olvidar que en esta tele escuela no hay recreo –amigos, son horas consecutivas de trabajo, y una ni ejercicio he podido hacer.. Así que cuando volvamos no se fijen en la grasa abdominal.
Es perseguir niños para adentrarlos a una nueva rutina que a ellos, pesar de haber nacido con la tecnología en la mano aun quieren relaciones reales, quieren sentir el calor y salir de este mundo de aparatos.
Espero pronto volver al jardín, a la alberca, a la calle, al restaurante, al helado o a donde sea que la vida me depare. Por el momento mis momentos felices son cuando tomo mi café, cuando puedo ver un ratito de Netflix, cuando me queda un momento libre para leer o convivir con los que más extraño, pero lo que sí sé es que nunca volverá a tener a mis hijos chicos en casa, que requieran de mi tiempo y de mi ayuda. Con su sonrisa y amor me llenó de consuelo y felicidad.
Esto no será para siempre así que les deseo que empiecen a disfrutar.
Por Sophia L. para Naran Xadul
