¿Por qué los bebés son tan cachetones?
Nadie puede resistirse a un bebecito con mejillas gorditas, ¿pero sabes por qué los bebés lucen tan adorables? La respuesta rápida es: instinto de supervivencia.
En la naturaleza humana y animal en general, las características físicas como tener ojos grandes, la nariz pequeña y la frente amplia, tiene como finalidad natural inspirar ternura y despertar un instinto protector en los progenitores para no ser abandonados y garantizar el cuidado hacia las crías.
Por otro lado, los cachetes gorditos responden a necesidades fisiológicas. Sí, esas mejillas preciosas y redonditas en realidad tienen algunas razones de ser, por ejemplo:
- Como la lengua de los bebés es mucho más grande, sus cachetes ayudan a que se mantenga en la posición correcta para agarrar el pecho durante la lactancia.
- La grasa que hay en las mejillas ayuda a que no colapsen al realizar el movimiento de succión y para que lo hagan con la fuerza necesaria para extraer la leche que necesitan.
¡Pero ahí no termina todo! Como sabrás, el olor de los bebés es adictivo para las madres ya que da una sensación de placer y felicidad pues se libera oxitocina, la conocida hormona del amor, lo que hace que sientas mayor conexión con tu bebé y él contigo, además de favorecer la lactancia.
¡Voilà! Ahora puedes ver que esa apariencia adorable en realidad es una trampa de la naturaleza para garantizar la supervivencia de las especies, ¿pero quién querría resistirse?