Las 8 mejores compras que puede hacer un papá primerizo
Mis gemelillos ya tienen 20 meses, y en estos 20 meses he comprado cosas buenas y otras no tan buenas. Mis cuñadas y amigas de mi esposa nos han dado cosas buenas, y otras no tan buenas.
Aquí te digo las mejores compras o cosas prestadas que hemos tenido y que valen la pena tener:
Una silla alta que se lave
No importa si eres fan de los colores y mil estampados en las cosas de tu bebé, o seas más fashion, o minimalista o lo que quieras. Compra una silla alta que sea extremadamente fácil para limpiar o lavar. Nosotros tenemos dos que la funda se quita y la puedes meter a la lavadora y es LO MEJOR DE ESTE MUNDO. Así puedes acabar de hacer el guacamole en ciclo delicado.
Baberos fáciles de desbabear
Siguiendo con las cosas fáciles de lavar. También hay baberos que se pueden meter a la lavadora. No son de tela tosallera, y se secan muy rápido. Llévate de todos los colores y tu hijo les dará el sabor.
Una torre de aprendizaje
Esta semana compramos una learning tower y ha sido la felicidad hecha en madera para los gordos. Esta torre hace que el niño pueda subirse y bajar solo y alcanzar las cosas altas(muy estilo montessori) Hay de varias marcas y hasta hay tips de cómo hacer la tuya, pero si quieres que tu toddler te “ayude” y aprenda a cocinar o supervisar su desayuno, esta torre es perfecta!
Un brincolín
Después de la cola de tu perro, estos brincolines son diversión que nunca termina para tu bebé. Además de ayudarle con su postura, ejercitarle sus piernitas y cuello, también tiene luces, sonidos y juguetes que lo entretendrán por días.
Vasitos de entrenamiento
Nosotros compramos, entre los vasitos de superman y batichica, y lo de oso, estos de Munchkin. Visualmente un poco más aburridos pero muy buenos para entrenar a tus bebés a tomar de vaso. Tienen un sistema buenísimo que no chorrea ni una gota pero cuando tu hijo quiere tomar, por arte de magia sale el líquido. Abracadabra!
El boppy lounger
Si hubiera algo así para adulto, créeme que lo comprarías y ahí vivirías. Básicamente este cojín es lo mejor. Es como una dona pero sin hoyo, pero moldeada al cuerpo de un bebé. Es ideal para que se eche una siesta, y es un medio transporte de cero emisiones. Cuando los gordos estaban bebecitos, ahí e echaban la siesta junto a mi esposa y cuando ella tenía que ir a otro cuarto, los podía cargar en su lounger sin despertarlos. Si alguien encuentra uno de adulto, avíseme por favor!
Calentador de botellas
Lo feliz que se ve esta mamá en la foto posando con su calentador de botellas, no es nada en comparación con la felicidad que esto me daba a las 3:17am. Todas. Las. Noches. No importa si tienes un hijo, gemelos, o triates, un bebé con hambre es inconsolable , y tu mejor amigo es este calentador de leche. Me acuerdo tener la botella de leche en el refri, lista y fermentándose para la toma de las 3 de la mañana. Medio dormido iba a la cocina, y la metía en el calentador, apretaba dos botones y en cuestión de par de minutos tenía leche calientita para uno de los gordos. Nota: no te la recomiendo para recalentar pozole o sopas espesas.
Colchoncito salva-rodillas
La hora del baño es lo mejor para tu bebé pero puede ser lo peor para tu cuerpo: para tu espalda, brazos y rodillas. Todavía no existe un arnés del que te puedas colgar para apoyar tu espalda, pero para las rodillas sí. Nosotros tenemos el Moby de ballena y es lo mejor. Te recomiendo vayas a la tienda y literal avientes todos los modelos al piso (y los recojas después) y te hinques en ellos para sentirlos y ver cuál te gusta más. A mi me veían raro en la tienda pero el Moby fue el que me convenció. Otros eran un poco más duros y menos amigables a los huesos.
Eso sí, esa ballena literalmente va a acabar nadando en el piso de tu baño, así que asegúrate de colgarla para que se seque.
Por Carlos Wollenstein para Naran Xadul
Carlos es papá primerizo de gemelos, niña y niño, suertudo él.
Productor de profesión y bloguero entre cambios de pañal.
Egresado como comunicólogo y publicista de la Universidad de Texas en Austin.
Mexicano de corazón pero viviendo en el extranjero,
aprendiendo día a día el arte de ser papá.
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