Guía rápida para bañar a tu recién nacido
Primeros meses
Uno de los momentos que más estrés, nervios y miedo causan es cuando tenemos que bañar a nuestro recién nacido.
¿Cómo bañar a esa personita que se ve tan frágil y que puede resbalarse de mis manos?, ¿acaso existe una guía rápida que ayude?
En cuanto lo tenemos en nuestros brazos en el baño se nos llena la cabeza de preguntas: ¿Cuáles son los primeros pasos que debo seguir?, ¿cómo lo agarro?, ¿cuál es la temperatura adecuada? y pareciera que no lo lograremos. Sin embargo, todo esto puede desvanecerse con una guía práctica que poco a poco nos ayudará a disfrutar este momento con nuestro bebé:
- 1. La frecuencia con la que lo bañemos la decidiremos nosotros, de acuerdo al clima y su tipo de piel. Es importante elegir productos con ingredientes emolientes para evitar que su piel se reseque.
- 2. Tengamos cerca de nosotros todo lo necesario, así no perderemos la atención en el bebé.
- 3. La temperatura del agua debe ser entre 34 y 38 °C, puedes medirlo con un termómetro para agua, incluso algunas tinas lo tienen integrado. Con 5 o 10 centímetros de agua en la tina bastará.Suena poco, pero es suficiente.
- 4. Recarguemos el cuerpo de nuestro bebé sobre nuestro antebrazo y sostengamos con firmeza su cabeza en la mano. Si lo bañamos en regadera, lo ideal es ponernos una playera para evitar que se nos resbale.
- 5. Humedezcamos una toalla pequeña para asear cara, orejas y pliegues del cuerpo.
- 6. Al momento de secarlo, evitemos frotar la toalla, mejor demos toques suaves para no lastimar su piel.
- 7. Apliquemos crema humectante, y usemos un cepillo de cerdas suaves. Además, este es buen momento para cortar las uñas y asear su nariz.
El siguiente vídeo nos muestra cada punto de esta guía rápida para bañar a un recién nacido, para tener una idea más clara de lo que debemos hacer para conectar y fortalecer el vínculo con nuestro bebé.
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