Si tu bebé no come bien, puede ser por esta razón...
Algunos bebés presentan cambios en sus hábitos alimenticios sin razón aparente, es decir, pareciera que de un día a otro tienen menos hambre, empiezan a hacer tomas de menos tiempo, hacen pausas con o sin llanto, o succionan con dificultad.
Pero, ¿cuál es la razón común por la que el bebé no come bien?
Si es tu caso, lo primero que debes hacer es identificar el motivo, podría tratarse de:
- Dolor en la garganta
- Malestar estomacal
- Una inadecuada técnica de alimentación
- Dentición
- Congestión nasal
Este último es uno de los causantes más comunes en los cambios alimenticios de los bebés; a veces es fácil de identificar por el silbido de las fosas nasales obstruidas por el moco, sin embargo, no siempre se logra escuchar.
Algunos peques con fosas nasales tapadas pueden reflejarlo a la hora de ser amamantados, pues comen de manera intermitente, es decir, succionan, hacen pausa para respirar y continúan.
La obstrucción nasal puede incluso interferir con sus horas de sueño y sus complicaciones pueden afectar los oídos o garganta.
Cuando tu recién nacido o tu bebé tenga estos síntomas, puedes realizar lavados nasales con una solución fisiológica, busca una que contenga un ingrediente adicional, como extracto de manzanilla para que mantenga hidratadas sus fosas nasales.
Realizar este aseo para mantener las fosas nasales despejadas es muy importante, pues debido a su inmadurez respiratoria, los menores de seis meses no pueden respirar por la boca; y aunque suena impresionante, este mecanismo favorece su alimentación ya que así pueden succionar y deglutir al mismo tiempo.
Cuando limpies la nariz de tu bebé hazlo con mucha delicadeza. Opta por el aseo previo a ser amamantado, después de darle un baño y revisarlo antes de dormir. De esta manera ayudarás a que coma y descanse mejor.
Revisado por Dr. Efrén Budar Guzmán. Pediatra. Cédula profesional 10899635
Fuente: Fairview y Cinfasalud