Así es un príncipe azul después de que te conviertes en mamá
Después de tantos años juntos es probable que tu príncipe azul haya cambiado, pero para bien, porque el amor se ve de distintas maneras y se demuestra en formas diferentes.
Después de varios hijos y un matrimonio, el amor no es como al inicio, al parecer después de tantos años con problemas y peleas, llega un punto en el que las parejas se acoplan y se aceptan tal cual, que el amor surge de una hermosa comodidad y complicidad.
Entonces el amor se convierte en tazas de té o de café recién hecho por las mañanas.
En tu marido haciéndote el desayuno para que puedas salir temprano a trabajar y no mueras de hambre.
El amor llega en forma de un hombre poniendo la ropa a lavar, recogiendo con los niños sus cuartos y lavando los trastes mientras tú estás en el sillón checando tu facebook.
En un hombre que hace la tarea con sus hijos, explica sobre matemáticas y los pone a leer sus libros.
En conversaciones con miradas, en abrazos por las noches que te llenan de energía. En tu marido siendo tu equipo corriendo este maratón de la vida de la mano.
En peleas que se arreglan en la mesa, con opciones, con soluciones, con compromisos y con amor.
En tardes de familia, paseos, niños corriendo por todos lados y subiendo a nuestra cama por las mañanas para despertarnos con sus manitas y llenando a papá de besos.
El amor es mejor con los años, pero no se da por arte de magia, es un trabajo mutuo lleno de respeto, confianza y aceptación.