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¿Tu bebé ronca y está muy irritable durante el día? Ésta puede ser la razón

Publicado: 3 de Octubre 2019
Estimulación y juego
Foto: IG @chasingthesummerfields
Foto: IG @chasingthesummerfields

Escuchar a un bebé roncar puede ser algo chistoso, pero a la vez preocupante para las mamás.

Sin embargo, aunque no siempre significa que haya algún problema, tienes que poner atención si existen otros síntomas que indiquen que hay algo extraño. 

No obstante, si tu hijo tiene más de dos años y notas que sus ronquidos son continuos, no descansa bien y está muy irritable durante el día, entonces es momento de revisar qué es lo que está ocasionando todo esto. 

Pero, ¿Qué son los ronquidos?

Son ruidos que se generan porque existe una obstrucción del paso del aire hacia la parte posterior de la garganta, es decir, la apertura y cierre por el paso del aire provoca la vibración en los tejidos de la garganta.

En el caso de los niños pequeños, los ronquidos muy fuertes y regulares se relacionan con diferentes causas como enfermedades respiratorias (gripe o resfriado), apnea del sueño, alergias nasales, reflujo, asma, entre otra.

Otra causa que favorece la aparición de los ronquidos y del mal humor es el aumento en el tamaño de adenoides o amígdalas, las cuales son glándulas que se encargan de atrapar las bacterias que generan infecciones, sin embargo, en ocasiones se infectan, crecen y dificultan el paso del oxígeno, es decir, más allá de ser un beneficio, favorecen la aparición de infecciones frecuentes.

¿Cómo darte cuenta que necesitas ir con el especialista?

Además de los ronquidos, los niños presentan otros síntomas ocasionados por una incorrecta oxigenación como: somnolencia durante el día, problemas de comportamiento, problemas de concentración, hiperactividad, dolor de cabeza, irritabilidad, mal humor o respiración por la boca.

En estos casos es necesario acudir con un especialista como un neumólogo pediatra, quien se encargará de realizar todos los estudios necesario para realizar un diagnóstico adecuado.

¡Ayúdale a dormir mejor!

Además de la supervisión médica, también puedes ayudarle a tu hijo a dormir mejor si lo acomodas de lado y reduces la presencia de peluches en su habitación.

También, si realizas lavados nasales o utilizas un nebulizador con agua salina para ayudarlo a respirar mejor por la noche, harás más fluida la flema y evitarás que se acumule en su garganta y la reseque.

Seguro con todos estos cuidados y tu amor de mamá, tus hijos tendrán una mejor calidad de vida. 

National Sleep Foundation, KidsHealth, Raising Children, Rush University Medical Center y la Pediatra Noemi Camacho.

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